WINX CLUB ALL: LAS LÁGRIMAS DE LA SIRENA
Todo comenzó una tarde de verano en el instituto Alfea para
hadas. Las Winx se encontraban justo enfrente de las puertas de la escuela
porque estaban esperando a alguien…
Bloom: ¿Alguien ha visto
esta mañana a Stella? No sé por qué tardará en venir.
Musa: Seguro que aún se está
maquillando…
Stella: ¡Chicas! Ya
estoy aquí. Ayer estuve hasta tarde diseñando nueva vestimenta Winx. Pero hasta
que no lleguemos a nuestro destino no os lo puedo enseñar, ¡es una sorpresa!
Entre todas abrieron un portal que
comunicaba con la Tierra
y cruzaron a través de él. Al otro lado estaba Roxy esperándolas. La saludaron
y Roxy les llevó en coche hasta su destino: una pequeña casa de madera situada
justo en la cima de un pequeño precipicio.
Stella: ¡Oh, no! Tiene
pinta de estar llena de insectos y demás… ¡PUAJ! Vayámonos de aquí, por favor.
Roxy: No hay de que
preocuparse, además, yo me ocuparé de los animales. Ya sabéis que me llevo muy
bien con ellos.
Las Winx sacaron el equipaje del
coche y se dirigieron a la puerta de la casa. Tecna escaneó la casa con un
nuevo artefacto de alta tecnología que estaban diseñando Timmy y ella.
Tecna: El escáner ha
captado la presencia de alguien en la casa. ¡Tened cuidado chicas se dirige a
nosotras.
El pomo de la puerta empezó a
girar.
Bloom: Transformémonos chicas, Winx Bloo…
Flora: Detente Bloom,
sólo es un anciano.
Anciano de la casa: ¡Oh, vosotras sois las chicas que
habitaréis la casa este fin de semana. Debo avisaros de algo, todos los turistas
que han permanecido en esta casa la han abandonado el mismo día por la noche
porque dicen que se escucha los llantos de una mujer en todas las salas de la
casa cuando llega la media noche.
Layla: No se preocupe,
nosotras somos las Winx, no le tenemos miedo a nada.
El anciano se fue y las Winx
metieron el equipaje dentro de sus habitaciones: la primera habitación era la
de Layla y Stella; la segunda, de Flora, Roxy y Musa; y en la última dormirían
Bloom y Tecna.
Antes de que la noche llegase,
querían pasear por la zona que estaba llena de vegetación. Pero antes de salir
Stella mostró la sorpresa a las chicas: había diseñado trajes de expedición al
estilo country la noche anterior.
Las Winx volvieron a
la cabaña cuando la noche llegó. Antes de dormir, todas se reunieron en el
salón principal. Roxy llegó con un libro de cuero con mucho polvo que estaba
escondido debajo de su almohada.
Roxy: Leyenda de Sirena,
se titula. Estaba escondido en mi almohada.
Tecna: Déjame analizarlo.
Bien, no está protegido con ningún tipo de magia, ¡podemos abrirlo!
Leyenda de Sirena:
“Érase una vez, un hada de la Tierra llamada Melody. Sus
poderes estaban relacionados con el agua y todos los días volaba por el
alrededor de las costas de Gardenia y de los pueblos cercanos. Un día conoció a
un humano y los dos se enamoraron pero en aquella época había una regla que
prohibía los romances entre humanos y hadas, así que Melody acudió a Morgana
pero ésta le prohibió volver a ver al humano. Melody no aceptó la decisión de
la reina y fue investigando por su cuenta a diferentes magos para ver quien
podía cumplir su deseo de estar con el
humano. Al final la búsqueda tuvo resultado y encontró a Ogron, un mago
de magia negra, que le prometió cumplir su deseo convirtiéndola en humana, para
ello le cortaría las alas y luego realizaría un hechizo sobre ella que le
privaría de sus poderes a cambio de ser humana pero si ésta no conseguía besar
a su prometido antes de medianoche ya no podría ser ni hada ni humana, se
volvería sirena. Melody había quedado con el humano al día siguiente del
hechizo en la costa de los deseos pero éste no apareció y la humana se
convirtió en sirena. Ésta, al no entender por qué no había acudido a la cita su
amado, se sentó en una gran roca cerca de la costa y empezó a cantar canciones
tristes que conseguían desviar a grades navíos y barcas. Ella lloró y lloró por
varios años hasta que pasó a ser un fantasma y sus lágrimas eran gotas de agua
que se iluminaban cuando entraban en contacto con el mar creando así una
combinación de luces y colores. Mas por culpa de ésta hada, Ogron comenzó a
cazar a otras hadas de la tierra y creó “El circulo negro”, formado por cuatro
magos oscuros”.
Las Winx se durmieron después de
leer el libro pero poco tiempo después se empezaron a despertar una a una pues
se escuchaba una triste melodía por toda la casa.
Tecna: ¡Viene de fuera!
Creo que es en el precipicio.
Todas fueron al precipicio y vieron a una persona sentada
en una roca.
Bloom: ¡Vamos chicas!
¡Winx Bloomix!
Roxy: ¡Roxy Believex!
Las Winx se acercaron a la persona
que emitía esa triste melodía, era un ser resplandeciente con un rostro
lloroso.
Stella: ¡Es una sirena!
Layla: ¡No! ¡Es Melody
la chica de la leyenda, la primera hada de la Tierra que perdió sus alas!
Melody: Así que habéis
leído el libro, de todos modos ya no hay nada que hacer por mí. Estoy maldita
por haber querido saltarme las reglas de las hadas, yo fui la causante de que
muchas de ellas perdiesen sus alas y fuesen encerradas.
Musa: Creo que sí hay una
solución, sí la maldición se creó porque no conseguiste besar a tu amado, puede
que con un beso de amor verdadero rompa parte de la maldición.
Flora: Pero no sabemos
quién es el amado.
Tecna: Yo creo que sí lo
sabemos, tenemos que encontrar al anciano de la casa, seguro que él es el amado
pues es el único que conoce esta historia ya que el libro lo escribió él.
Roxy: Yo me encargaré de
localizarlo, soy un hada de la
Tierra.
Roxy volvió con el anciano pero Melody no lo reconoció. Sin
embargo el anciano sí que se acordaba de ella.
Anciano: ¡Melody! ¡Te he echado tanto de menos!
Melody: ¿Entonces por
qué no acudiste el día que te cité? Te estuve esperando.
Anciano: Un hombre
llamado Ogron me dijo que no querías volver a verme y yo respeté tu decisión.
Melody: Ese mago me
engañó y perdí todo lo que tenía.
Anciano: Bueno, aún te
quedo yo.
El anciano besó a Melody y rompió la maldición. La cola de
Sirena desapareció y sus poderes de hada de la Tierra volvieron. El
anciano recuperó su juventud.
Melody: Ahora los dos podemos partir, pero antes debéis
saber algo Winx. En agradecimiento por haberme salvado, esta noche soñaréis una
de vosotras algo que lleváis mucho
tiempo esperando para ver.
Melody y el joven partieron. Las Winx volvieron a la cabaña
para dormirse lo más rápido posible para saber quién sería la afortunada. Una
de ellas ya había conseguido entrar en el sueño especial. Ella se encontraba en
un lugar rodeado de humo de color blanco que tenía diferentes tonos de luces.
De fondo se escuchaba la melodía de Melody pero una versión más alegre.
Nabu: ¡Layla!
Ella se giró.
Layla: Nabu, ¿que haces
aquí? Pero si tú…
Nabu: Eso no importa
ahora, quería verte por última vez. Sólo deseo verte una vez sonreír y, sin
importar donde yo esté ahora, me hace muy feliz que alguien haya conseguido
volver a entrar en tu corazón.
Layla: Espero que tu
también seas feliz haya donde estés, hubo un tiempo en el que no superé tu
pérdida pero Roy me ayudó a recuperar mi sonrisa y que desapareciesen mis
preocupaciones.
Nabu empezó a desaparecer y Layla sin pensarlo dos veces se
fue hacia él y le abrazó, los dos se miraron a los ojos y se besaron. Dos
lágrimas de luz, como las de Melody,
recorrieron las mejillas de Layla
Layla: Siempre te he
amado, y siempre te amaré.